![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
|
|
![]() |
|
En el caso de El último mohicano, aún tenemos un último elemento que complica el deslinde. El filme está basado en una adaptación cinematográfica anterior (1936, guión de Philip Dunne) de una novela escrita un siglo antes (Fenimore Cooper, 1826) 7. Aunque la adaptación no sea fidedigna: |
|
|
![]() |
El caso de La misión es particularmente interesante y ya ha recibido atención debida en algunos estudios: |
|
|
|
NOTAS Y REFERENCIAS
1.Así comienzan las versiones españolas de ambos filmes.
2.En esta casi permanente Guerra Colonial que es el XVIII hay que incluir a España: véase TÉLLEZ ALARCIA, D., “La Independencia de los EE.UU. en el marco de la Guerra Colonial del s. XVIII (1739-1783)”, en Tiempos Modernos, 5, octubre 2001, pp. 1-30, http://tiemposmodernos.rediris.es
3.En lo más general nos remitimos a las obras de Ferro y Solin: FERRO, M., Historia contemporánea y cine, Barcelona, 1995 y SORLIN, P., The film in history. Restaging the past, Oxford, 1980.
4. MONTERDE, J. E., SELVA MASOLIVER, M. y SOLA ARGUIMBAU, A., La representación cinematográfica de la historia, Madrid, 2001, p. 39. Esta doble lectura puede comprobarse en numerosos ejemplos. Véanse algunos españoles: DUPLA, A. e IRIARTE, A. (eds.), El cine y el mundo antiguo, Bilbao, 1989, HUESO, A. L., El cine y el siglo XX , Barcelona, 1998, PAZ, M. A. y MONTERO J. (eds.), Historia y Cine. Realidad, ficción y propaganda, Madrid, 1995, UROZ, J. (ed.), Historia y Cine, Alicante, 1999, CARAMÉS LAGE, J. L., ESCOBEDO DE TAPIA, C. y BUENO ALONSO, J. L. (eds.), El Cine: otra dimensión del discurso artístico, 2 vols., Oviedo, 1999 y TÉLLEZ ALARCIA, D. y PABLOS PÉREZ, R., “El Espartaco de Kubrick. Realidad y Ficción”, en Iberia , 3, 2000, pp. 287-302.
5.El director, Roland Joffé, lo veía como una necesidad diáfana: “I'm remember saying to him: ‘Robert this movie will never work as we can find real indians, that's not extras, (…) I need to find the truth, I need to find the indians themselves'. Robert look to me and say: ‘Well, good, go and find them' ”. Esta cita aparece en la versión comentada por el propio director de La misión, contenida en la versión española del DVD, recientemente editado (2003). “Son el eje. Trata de un poblado destruido y esa comunidad también corría ese peligro. Sus sentimientos eran similares a los de la película. Aportarían esa sinceridad que yo no podía crear”, cita extraída del documental Omnibus , en la misma versión en formato DVD. Los waunanas, de hecho, creían en un principio que los iban a secuestrar y a devorar. El equipo de Joffé tuvo que llevarse a Cartagena de Indias a 10 de sus hombres más importantes para que viesen que el proyecto iba en serio y para que calmasen a sus compañeros. En El último mohicano, Mann empleó nativos en un primer momento, pero también extras.
6. Una superficie construida de 160.000 pies cuadrados, dominando el Lago James, en Carolina del Norte. También resultó una labor de titanes la filmación de las escenas de combates: “Mr. Mann felt that Linville Gorge gave him the perfect backdrop for shooting scenes in the wilderness of 18th century New York. The rugged country challenged the construction crews. Moving heavy equipment and hundreds of cast members in the mountains only to be rained out or to have the director change his mind proved to be frustrating and costly. The company closed out its 6 month filming in the mountains six weeks behind schedule due to heavy rains throughout the summer of 1991. Cost over runs of $20,000 an hour during shooting were not uncommon. By October the budget had exceeded forty million dollars. When the film was completed, the production company was required by law to restore the area”, HARRIS, E., “Cooper on film”, en The James Fenimore Cooper Society Website, http://external.oneonta.edu/cooper/drama/film.html .
7. De hecho existen decenas de versiones cinematográficas y televisivas de esta obra: “From its first adaptations in 1909 as a D. W. Griffith one-reeler and in 1911 as two different one-reelers by the Powers and Thanhouser Film Companies to its latest incarnation in 1992 as a Michael Mann potboiler, more than a dozen interpretations of the novel have appeared in various forms, from silent picture to Mascot serial to animated version to BBC television series to Hollywood epic”, WALKER, J., “Deconstructing an American Myth. Hollywood and The Last of the Mohicans” en MACDOUGALL, H. C. (ed.), James Fenimore Cooper: His Country and His Art (No. 10), Nueva York, 1999, pp. 77-84. Walker reseña, no obstante, que, hasta que la familia Cooper no se decidió a colaborar con la edición precisa de los textos de Fenimore Cooper, en los años sesenta del s. XX, éstos sólo podían leerse en toda una “pléthora of corrupt texts”.
8. Ibídem , p. 78, remata diciendo: “While most of the directors do a sterling job of targeting Cooper's mise en scene, none of their film versions of the novel accurately reproduce Cooper's plot, and few come close to understanding Cooper's theme”. Tan sólo la versión de 1920, por Maurice Tourneur y Clarence Brown, se acerca notablemente al argumento de Cooper. Sobre la versión de Mann, es taxativo: Of all the many revisions of Cooper's novel that appear in the 1992 version, Mann's decision to turn The Last of the Mohicans primarily into a love story and to ignore the essence of the Native-American theme is the strangest and most damaging plot twist of all. It is one thing to borrow scenes from other Leather-Stocking novels (the canoe chase from The Pathfinder, for example); to invent scenes (Hawk-eye's shooting of Duncan Heyward to prevent his suffering at the burning stake, Magua's killing of Colonel Munro); or to mismatch lovers (Duncan and Cora rather than Duncan and Alice, Uncas and Alice rather than Uncas and Cora) to sell theater tickets. But to manipulate the story's plot in an attempt to make history more vivid and realistic for the contemporary filmgoer is questionable directing and screenwriting. To focus on the love affair between American literature's most strongly individualistic, anti-authoritarian, and anti-British mythic hero and Cora Munro is to miss the essential theme and flavor of Cooper's classic tale”.
9. Incluso la crítica literaria deja su huella. La feroz caricatura que Mark Twain hizo de la obra de Cooper, en el número de julio de 1895 de la North American Review, no es ajena a la poca valoración del autor y de su obra y, por tanto, a lo poco que los directores y guionistas se han ceñido a la hora de trasladarla a la pantalla. Íbídem, p. 85.
10. El título completo de la novela es: The Last of the Mohicans: a narrative of 1757 . Forma parte de un ciclo más amplio, conocido como Leatherstocking Tales, dentro de la cual es la segunda entrega. El denominador común del ciclo es el personaje de Ojo de Halcón, Natty Bumppo, también llamado a lo largo de las diversas entregas Leatherstocking, Deerslayer, Pathfinder, Le longe carabine, etc. Esta información aparece en la introducción de COOPER, J. F., The Last of the Mohicans, Londres, 1993. La edición de es de Wordsworth Editions, colección Wordsworth Classics.
11. Mohegan History, http://www.dickshovel.com/moh.html
12. Sobre la espectacularidad de las imágenes, merece la pena anotar algunos detalles, como el Óscar conseguido por La misión en la categoría de fotografía (otro se llevó El último mohicano al Mejor Sonido), o el hecho de que sus imágenes se basen “en ilustraciones de enorme valor antropológico e histórico de misioneros del XVIII en Paraguay”, CASCÓN BECERRA, J. A., “El cine como fuente para la Historia. Iberoamérica y el cine norteamericano”, en Trocadero, Revista de Historia Moderna y Contemporánea, 14-15, 2002-2003, p. 44.
13. NIETO, J., Música para la imagen, Madrid, 1996, p. 49. Cit. en TÉLLEZ CENZANO, E., “El discurso musical como soporte del discurso cinematográfico. Análisis de ejemplos (I)”, en Espéculo, 6, julio 1997, pp. 1-11, http://www.ucm.es/info/especulo/ Ver también desde una perspectiva teórica, TÉLLEZ CENZANO, E., “La composición musical al servicio de la imagen cinematográfica. El discurso musical como soporte del discurso cinematográfico”, en Espéculo, 4, noviembre 1996, pp. 1-12, http://www.ucm.es/info/especulo/ ,
14. TÉLLEZ CENZANO, op. cit ., 1997, p. 5. Ver también RODRÍGUEZ FRAILE, J., Ennio Morricone. Música, Cine e Historia, Badajoz, 2001, pp. 217-248.